EMPRESAS ECOLÓGICAS
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Manejar una empresa ecológica
tiene sus beneficios financieramente y en cuanto a reputación. Los consumidores
tienden a preferir una compañía que esté lista para mostrarles cómo está
tomando medidas para proteger los recursos ambientales, asegurar el bienestar
de sus empleados y sus proveedores y está revisando constantemente sus intentos
por lograr que minimicen las emisiones y el daño al medio ambiente.
El cambio ecológico de las empresas es algo bueno para el ambiente
y para la huella de emisiones de carbono. Una clave para las empresas es
aprender a seguir las tres R’s: reducir, reciclar y reutilizar. Además, saber
lo que tu competencia está haciendo para hacerse más ecológica es algo de lo
que debes estar pendiente. Convertirse en una empresa ecológica no es un cambio
sencillo; es una tarea en desarrollo que requiere aprendizaje y revisión
constante, junto con la disposición de admitir los errores. Al final del día,
tu negocio será mejor por los cambios.
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